Más amor. No menos.
No hay experiencia en la vida que requiera menos amor. No hay seres, estados, circunstancias, que merezcan menos Amor.
Hay, como humanos, una herencia de dolor y trauma que debemos transformar expandiendo más amor, no menos.
Hay que cavar profundo para descubrir que nuestra médula, núcleo o esencia es… AMOR.
El amor no es pasar por alto la naturaleza de la totalidad de la vida, poniéndole nuestras condiciones personales. No es determinar…esta parte sirve, esa parte no sirve, esta parte debe desaparecer o cortarse, esta parte debe hacerse más grande, o vamos a ponerle una máscara a esta parte.
Enmascaramos el amor incondicional cuando nos escondemos de partes de nosotros mismos que no han sentido o conocido el amor.
Este es nuestro dolor…el aspecto, rincón, percepción en los que hasta hoy no veíamos amor.
Al principio, puede escocer que el amor purifique y “revuelva la olla” haciendo que surja de todo, y duela. Pero también derrama los bálsamos de la compasión y la comprensión, la curiosidad que lleva a la auto indagación y el perdón... atención y presencia.
El amor profundo no aparta la mirada, sino que se abre y se profundiza aún más.
Este es el tipo de amor que aún no hemos aprendido a darnos a nosotros mismos, a volcar luego hacia “afuera” …ese es el amor profundo que podemos permitirnos percibir, sentir, internalizar y expandir infinitamente.
Abrirnos y volcar Amor a nuestro dolor, a nuestra rabia, a nuestro miedo. Más amor al desvío, al escape y al aferramiento. Más amor a nuestros cuerpos dolientes, enfermedades y a nuestras penas. Más amor a nuestra alegría, pequeños placeres y nuestros deseos. Más amor a nuestra hambre y vergüenza. Más amor a nuestros dones. Más amor a nuestra luz y a nuestra oscuridad.
Más amor a los corazones desnudos bajo las tormentas de cada momento presente.
Nunca rehusar aprender y trasmitir los caminos de este Amor.
¿Cómo puedo ofrecerme a mí mismo, a este corazón, esta alma, a este ser humano más amor y percibiendo la unicidad, desplegarlo sin medida hacia lo que generalmente se considera “lo otro?
No siempre llegamos a ver las cosas como son.
Diría que casi nunca, por lo tanto, tratar de juzgar cuando algo merece o no que lo incluyamos en el AMOR sería, aun humanamente, ridículo.
Además, si llamamos a este Amor…INCONDICIONAL…eso implica que no se le pone condiciones, barreras, prejuicio ni juicios…solo se le deja fluir desde su fuente que es LO QUE SOMOS…LO QUE ES
Más amor siempre, eternamente…nunca menos amor.
Gracias. Gracias. Gracias
Bellísimo texto!!! Cuanta Verdad!!!
ResponderEliminarGRACIASSS Amada Tahita!!!
Abrazos infinitos!!!!!
No se puede agregar nada.....lo que somos, lo que es, tan sabio mensaje, gracias querida Tahita y mucho, mucho amor para mi, para vos y para todos, cariños y que estés bien
ResponderEliminarGracias por este recordatorio tan importante 🙏🏽
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