Alineados con el flujo de la Vida

El místico y sacerdote jesuita, Anthony de Mello, dijo una vez: "La iluminación es una cooperación absoluta con lo inevitable". Lo que traduzco como…estar absolutamente abiertos a la vida tal como es.

Alinearnos con el flujo de la Vida es esencial. Si nos movemos fuera de alineación, nos volvemos incapaces de ser uno con el flujo de la gracia. La gracia se derrama constantemente, pero solo podemos incorporarla cuando estamos alineados, o sea cuando lo que pensamos, sentimos y obramos se mueven al unísono y abiertos a la aceptación de lo que es. Así que lo más sensato es mantenernos alineados, dejando que el flujo de la vida se mueva a través de nosotros.

¿Cómo nos cerramos a flujo de la vida?

De innumerables maneras, pero especialmente creyendo que las cosas deberían ser de otra manera de como son.

Nos atrapa sentir que la felicidad no es posible a menos que las cosas cambien. En consecuencia, nos causamos tremenda infelicidad, porque exigimos que las cosas sean diferentes.

Es interesante notar cómo sucede esto. Creo que surge de nuestra confusión acerca de lo que trae felicidad. Los condicionamientos sociales nos llevan a creer que necesitamos ciertas cosas para ser felices: "Si puedo conseguir este trabajo", "Si puedo ganar tanto dinero", "Si puedo comprar una casa en ese vecindario", entonces seré feliz. O podríamos pensar, si solo fuera más saludable o más delgado, o si mi jefe renunciara para poder tener un jefe diferente, o si tuviera un cónyuge diferente ... y así sucesivamente.

Esperamos que las cosas sean diferentes para sentirnos bien con la vida. Mientras sigamos vinculando nuestra felicidad a los eventos externos de nuestras vidas, que siempre están cambiando, seguiremos esperando en vano.

¿Y si nos detuviéramos y nos alineamos con la corriente de lo que es? 
¿Qué pasa si nos movemos con ese flujo? 
¿Qué significaría eso para nosotros, ahora mismo?

Alinearse con lo que está aquí es una forma de practicar la presencia. Nos permite responder a nuestro mundo con creatividad y compasión.

Lo que realmente está sucediendo es que nos estamos abriendo a la inteligencia universal, el amor universal que puede fluir a través de nosotros cuando estamos alineados. 

Cuando estamos alineados con el flujo de nuestras vidas, hay una sabiduría y un amor universales que fluyen a través de nosotros, que son parte de nuestra verdadera naturaleza.

Cuando por el contrario nos cerramos, nos resistimos o luchamos…además de agotarnos, el flujo se interrumpe en esos nudos energéticos tensos y nos perdemos de los dones de la Gracia que emana del Ser ininterrumpidamente.

No es fácil darnos cuenta de cuando nos apartamos del flujo…pero paulatinamente, si estamos atentos, lo percibiremos más fácilmente y podemos reinsertarnos en esa corriente no forzada, en esa corriente en la que suave y fácilmente nos dejamos ir por la vida, sin resistencias, pase lo que pase, acompañando el flujo…siendo el flujo.

 

¡Y las bendiciones fluyen!