Causas…y efectos- Tahíta

 

Como personajes en la rueda del tiempo, tal como nos movemos interiormente en la conciencia, atraemos al mundo exterior…y él nos atrae. Ley de atracción la llaman.

Los pensamientos son una gran fuerza edificante de la que disponemos. A medida que nuestros pensamientos se sutilizan, más poderoso y sutiles son sus efectos.

Todas las cosas que existen temporalmente en el universo físico, existieron primero en el universo de lo invisible y sutil, en el plano espiritual, antes de manifestarse.

El reino invisible es el reino de las causas. …el visible, de los efectos.

Así, la naturaleza del efecto está siempre determinada y condicionada por la naturaleza de la causa.

Un Divino Encadenamiento entrelaza el Universo entero…y así, si sincronizamos lo humano con lo Divino y obramos de acuerdo a leyes superiores de reinos que parecemos como humanos desconocer, esas fuerzas unen su poder al de nuestra individualidad temporaria…y nos movemos como un eslabón de la cadena poderosa del Universo.

La Causa suprema es el Espíritu.

Ese poder infinito que todo lo habita, todo lo anima y en todo y a través de todo se manifiesta en esencia, presencia y potencia…es el eterno e increado poder vital del que todo emana.

El espíritu se manifiesta a través de leyes eternas e inmutables, y fuerzas que rigen el Universo.

Cada acto de nuestra vida está regido, a su vez, por esas leyes y fuerzas. Nada hay sin su correspondiente Ley.

Dios es Ley, el Infinito es ley, la Consciencia suprema es Ley.

Aquello fuera de lo que nada existe…es un campo de energías en el cual vivimos, nos movemos y somos.

Aunque temporalmente nos diferenciamos de ese infinito Campo, por una limitada percepción, nuestra vida esencial es ESPÍRITU.

Podemos abrirnos a ese flujo, y en la medida en que lo hacemos, recibimos su poder, su fuerza, su sabiduría.

Si el poder del Espíritu no tiene límites…los límites de nuestro poder como personajes humanos tal vez los trazamos nosotros mismos por desconocer ese fluir que nos hace canales Divinos.

 

Continuaremos reflexionando…

 

Gracias. Gracias. Gracias