Siempre he observado que durante las Pascuas las personas se sobresaltan en lugar de pacificarse, se ponen ansiosas, se aceleran, en lugar de aplacarse y las emociones se detonan por doquier.
No en vano nos previnieron. Pues aunque sabemos que nuestra esencia está al mando( y trasciende la influencia de los astros, las lunaciones y la energía que innecesariamente vierten en la atmósfera psíquica quienes rezan, piden o se lamentan en nombre de festividades religiosas, respetables claro, pero peligrosamente saturadoras del campo energético)…no así nuestra persona humana, nuestro ego llameante y reactivo, nuestra personalidad casi siempre herida en miles de batallas de todo tipo.
Y sumemos que la pascua ocurre en una luna llena o inmediatamente después de ella, lo que de por sí aumenta la potencia de las emociones.
Sepamos que todos esas inundaciones energéticas sacan toda la sombra a pasear, fuera de sus escondites confortables y nos moverá en una dirección u otra hasta que realmente nos plantemos intuitivamente abiertos, a escuchar internamente qué es oportuno para el momento y qué no lo es, para, aunque más no sea, sostenernos de pie sin que los campos energéticos de los demás, sumados a nuestra partes inconscientes, nos derrumben emocional, mental y hasta físicamente.
No me llevo por las predicciones, solo las observo desde la orilla. Lo que más observo es cuánto nos está costando, a todos los que contacto, tal vez a unos pocos no, mantenerse en calma…por lo cual creo que no es momento de sociabilizar demasiado, solo lo absolutamente necesario, y tratar prioritariamente de estar solos, al menos por ratos, y en la naturaleza, aunque sea la de un parque, para los que viven en la ciudad. No hay ninguna misión que no sea la tarea del día a día de sostenernos lo más centrados posible mientras se suman energías al campo de juego.
Ante todos los eventos mundiales y personalmente humanos, nadie sabe lo que ocurrirá. No sabemos si esto es un mágico toque de redención, un cambio que soportaremos o el comienzo de un viaje para dejar los cuerpos densos y seguir de otra forma. Es infantil creerse todo cuanto se dice, pues cientos de voces se levantan, y muchas se contrarían mientras otras se replican o copian, sin saber nada…pues eso es lo que sabemos NADA. Los gurúes y profetas tanto apocalípticos como imaginarios de mágicas iluminaciones en tránsito…deben honrar el silencio, hoy más que nunca, y acompañar silentemente el AQUÍ Y AHORA sin prestar sus vehículos a mensajes que no se sabe de donde surgen ni con qué propósito.
Un llamado a la coherencia sería decirles y decirme…EL REINO DE DIOS DENTRO TUYO ESTÁ…y viene bien considerando la fecha…pues parece que no acabamos de comprenderlo. Sé la tremenda importancia de los acontecimientos que los astros configuran y cómo unos cientos o miles golpeándose el pecho en culpa y dolor o rezando pidiendo lo que no corresponde a su realidad, puede hacer, pero ¿quién ha puesto esas configuraciones en nuestro plan como humanidad? No hay azar, ni casualidad…y sea lo que sea lo que ocurra está en un plan que solo abre su abanico de posibilidades ante nosotros si vamos dentro para contactar con la parte del reino que como herencia recibimos, cuyo Rey, que es nuestro Yo en su manifestación última, lo llames como lo llames o te abstengas aún de nombrarlo, teje y desteje lo que ocurre partiendo de nuestros propios hilos, de lo que estamos aceptando, creando o entregando…pues hay muchas maneras de contribuir a éste entramado.
No creo en planes para doblegarnos o manipularnos…es irrisorio creer por un lado que somos co creadores de todo y por el otro pensar que se nos puede manejar como piezas de dominó. Claro…ustedes pueden pensar o sentir lo que sea…pero antes de hacerlo, eviten crear esa realidad, y siempre elijan lo más amoroso, suave y coherente…pues es un aporte invalorable...
AUNQUE PERCIBAN CAOS A SU ALREDEDOR, E INCLUSO EN SU VERTIENTE EMOCIONAL HUMANA.
Mi intención no es decirles qué hacer, sino que les doy el punto de vista de lo que percibo, siento y a veces compruebo, no siempre.
Las energías llegan y son fuertes, según las siento, y no podemos ni desafiarlas ni escondernos…solo podemos relajarnos y estar atentos para no sumar al caos, aunque suene difícil…y si nos salimos del centro y nos irritamos y no lo logramos…no importa…nos recentramos y volvemos a tratarlo.
Los más tocados o al menos los que más reconocen esa potencia energética, no son los más mundanos e inconsciente. Los que estamos expendiendo nuestra conciencia recibimos más cuanto más podemos procesar, sabiendo lo que está ocurriendo y avisados de que tenemos ahora sí que NO SER PARTE DEL MUNDO…y eso no es apartarse totalmente de la sociedad, sino NO ENTRAMAR NUESTRA ENERGÍA EN LOS PATRONES DE CAOS EN QUE LA MAYORÍA DE LA HUMANIDAD ESTÁ ENREDÁNDOSE.
Corten cuantos hilos puedan. Disciernan en su interior éstas palabras y sabrán cuales cortar.
Recuerdan las palabras bíblicas…EL REINO NO ES DE ÉSTE MUNDO…LLEGARÁ EL DIA EN QUE DOS ESTARAN TRABAJANDO EN EL CAMPO…UNO SERÁ TOMADO Y EL OTRO SERÁ DEJADO….
¿Cómo lo interpretan? Es hora de abrir completamente nuestra intuición para percibir lo oculto de cada enseñanza, crística, búdica o la que sea, pues en ellas escondimos los códigos que ya podemos interpretar.
No se refiere al fin del mundo ni a la llegada de naves…disciernan en éste momento, pues no hay otro…Tal vez se trate de cómo las energías toman o no a distintas personas…cómo nos damos cuenta o no, como se nos va mostrando que el permanecer FUERA DEL MUNDO …energéticamente es la manera de contactarse con EL REINO que no es humano ni está fuera, ni en las religiones, ni en internet, ni en nada manifestado por otros, SALVO EN ESA URGENCIA INTERNA QUE SENTIMOS DE CONECTAR CON LA DIVINIDAD Y DESPRENDERNOS DE LO MENOS ESENCIAL PARA DESENREDARNOS DEL CAOS QUE LA HUMANIDAD TEJE.
La buena noticia…NO SOMOS HUMANOS.
Al menos…no solo humanos. Si no, ya no habría nada que hacer.
Por eso siempre se me llama a hablar de EMERGENCIA….emerger…dejar emerger la parte que ni conocemos de nuestro Ser para terminar de estar golpeándonos contra una dualidad que no nos es propia.
Tal vez para eso estoy aquí…y lo están ustedes….para permitir lo real emerger.
Nos llenan de predicciones…y las predicciones leídas y creídas por millones, crean lo que ha sido predicho…pues no hay un antes y un después en una profecía, y a veces el desenlace es la causa no al revés…por lo tanto, lo importante es si leen predicciones, canalizaciones, etc., lo hagan sin aceptarlas como realidad ineludible, y luego las suelten…pero nunca soltarse de su percepción interna, nunca de su guía divina. Las leo, porque me preparo antes para no creerlas, no co- crearlas…salvo que así lo decida…pero la mayoría aún las toman por guía sin saber que son los causantes de cualquier cumplimiento.
SEAMOS INOCENTES COMO NIÑOS…y terminen la frase ustedes…inocentes creando lo mejor y entrando en el silencio…y sabios como serpientes sin dejarnos cargar la mente. Cuanto más quieta, mejor…puesto que nada sabemos en nuestro aspecto humano.
Solo estamos AQUÍ Y AHORA…tratando de aceptar las energías, incorporando las que podemos, despreocupándonos por las otras y estando intuitivamente seguros de que eclipses, cruces cardinales, desastres naturales, guerras, fechas especiales preñadas de energías avasallantes o lo que sea, ES NUESTRO…no algo que llega al azar. Eso es FE. Sin creencia alguna, ni en un presunto salto cuántico, ni en un final apocalíptico, ni en nada.
La FE es una caída sin red, en lo desconocido.
La red, es la creencia…y mientras la sostengas, nunca sabrás nada de lo que hay más allá de ella.
LES ABRAZO EN EL UNO.
Tahíta
Muchas gracias querida Tahita, muy oportuno éste texto que nos compartes, y muy real , es la descripción perfecta de cuanto está ocurriendo "afuera". Muchas gracias y un cariñoso abrazo.
ResponderEliminarQue reflexión tan sabia y necesaria en estos tiempos tan convulsionado. Muchas Gracias Tahita.
ResponderEliminarGRACIASSS Amada Tahita por este aporte tan valioso y oportuno en estos tiempos tan desafiantes...
ResponderEliminarInfinitas Bendiciones!!!!